Primero: La existencia de la discrepancia es una forma de preceder de Alá en Su Creación

Dice Alá en el Corán:

Si tu Señor hubiera querido, habría hecho de todos los hombres una sola nación [de creyentes]; [pero por Su sabiduría divina concedió al hombre libre albedrío] y no cesan de discrepar.

Excepto aquellos de quienes tu Señor tuvo misericordia [y los guió]. Allah creó a los hombres, [y a través de sus obras se evidenciará quién es creyente y quién no] y decreto que llenaría el Infierno de genios y humanos. [1]

También el Profeta –que la paz y la misericordia de Alá sean con él- informó que le pidó a Alá que no hubiera fuerte discrepancia entre su comunidad y le fue negado.[2]

Así haz de saber que aunque esta discrepancia este predestinada, y que Alá –Majestuoso y Poderoso- quizó que existiera; esto no quiere decir que a Él le complazca ni que ame que suceda esto, sino que nos advierte de ella y es algo que reprende.

Y si se es preguntado ¿Cómo puede ser que se junte algo que Alá quiera y reprenda al mismo tiempo?

La respuesta es: esta es la razón por la que discrepó la gente en un gran número, y siguieron diferentes caminos, pero haz de saber que lo que Alá quiere es de dos tipos:

1.- Lo que Alá quiere por sí mismo. (es decir la escencia de ese acto en sí, y lo que sucede alrededor de ello) Como el Monoteísmo, la bondad a los padres, el bien, la caridad, Su adoración...

2.- Lo que Alá quiere no por sí mismo, sino por lo que acontece alrededor de este asunto.

Es decir, Alá no gusta de la discrepancia en sí, porque si nos damos cuenta no hay un beneficio en sí misma, también vemos que hay problemas y perjuicios por el sectarismo, pero Alá quiere que a través de estos problemas surjan otros actos por los cuales ha sido creada esta discrepancia y este sectarismo, como una medicina que es amarga y que se tiene que tomar para que al final se logre una cura.

Por lo tanto el que exista la discrepancia y el sectarismo tiene una gran Sabiduría, porque Alá quiere con ello:

a) Que los siervos apreciemos el Gran Poder de Alá para crear dos asuntos que para la creación son contradictorios y a la vez relacionados.

b) Exponer los efectos de Sus nombres conforme a su Predominación; como el Victorioso (Al-Qahhâr), El Severo en el Castigo (Shadid ul’Iqâb), ya que al existir estos nombres, tiene que existir algo que se relacione con ellos.

c) Exponer los efectos de Sus nombres conforme a Su Sabiduría; ya que Él –Alabado sea- es el Omnisciente (Al Hakîm) y el Informado (Al-Jabîr), quien coloca cada sunto en lo que le corresponde, y así también con lleva Su conocimiento de todo, y Su sabiduría en ello.

Dijo el Jatib de Ahlu Sunnah Ibn Qutaibah Ad-Dinûri:

«Quien hizo diferente a los hombres en sus aspectos, formas, colores, idiomas, voces, sus formas de caminar, en su huellas, hasta diferenciar ... entre los hombres y mujeres; es quien los hizo diferentes en sus puntos de vista, y quien los hizo diferentes en sus puntos de vista es Quien quizo la discrepancia para ellos, ya que no se completa la Sabiduría ni la Capacidad sin que se cree una cosa contraria, para que se conozca que es lo que la acompaña, a través de la luz se conoce la oscuridad, con el conocimiento la ignorancia, con el bien el mal, con el beneficio el perjuicio, y con lo dulce se sabe lo amargo, dice Alá el Altísimo:

Glorificado sea Aquel que creó todas las especies que brotan de la Tierra, a los humanos, y otras criaturas que desconocéis.[3]

[En árabe lo que es traducido como especies] es Aswây, Los antónimos y las especies, como el macho y la hembra, lo seco y lo húmedo, dice el Atlísimo:

Y ha creado la pareja, el macho y la hembra [4]».[5]

Es por ello que:

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[1] Corán 11:118-119.

[2] Sahih Muslim.

[3] Corán 36:36.

[4] Corán 53:45.

[5] Ta’wil mujtalif al-hadiz p.14.